Una situación como la violencia doméstica se convierte en una de las problemáticas más delicadas y graves que afectan a muchas familias en el mundo. Tiene consecuencias y resultados muy negativos, tanto para las víctimas como para toda la sociedad.
La violencia doméstica es cualquier forma de abuso o agresión que ocurre dentro de una relación familiar o de convivencia. La misma puede conllevar abusos físicos, sexuales, psicológicos, emocionales, económicos o verbales, entre otros. La violencia doméstica se configura como un delito. Es un problema social que afecta a la salud física, mental y emocional de las víctimas.
Un procedimiento por violencia intrafamiliar puede iniciarse en cualquier momento. Lo esencial es que existan indicios o evidencias de que se está produciendo algún tipo de violencia en una relación familiar.
Las personas que están experimentando o que han sido víctimas de la violencia doméstica pueden buscar ayuda y protección a través de diversas Instituciones y Organismos de carácter público: la Policía, los Trabajadores Sociales, los Tribunales de Familia, y Organizaciones no Gubernamentales.
Es esencial que las víctimas de violencia en el hogar busquen ayuda de manera inmediata. Cuanto antes se detecte y se trate la problemática, mayores serán las posibilidades de prevenir consecuencias más graves.
Veamos algunas de las organizaciones que proceden en estos casos de agresión en el hogar:
Estos son algunos contactos telefónicos disponibles para una víctima de violencia doméstica:
Estos son los pasos que se pueden realizar para denunciar un caso de violencia doméstica en Honduras:
Para concluir, cuando se inicia un proceso de violencia entre la familia, se debe brindar toda la información disponible a las autoridades. Esto contribuye a que investiguen la problemática y se establezcan las medidas necesarias para la protección de las víctimas.